Necesitamos hablar de una frase que todavía circula en las conversaciones entre los equipos de tratamiento, los sistemas de atención médica e incluso dentro del campo de los trastornos alimentarios: “pacientes psiquiátricos”. Todavía escuchamos este término utilizado de manera despectiva, estigmaes una situación llena de prejuicios y de juicios, como si hubiera un “nosotros” y un “ellos”, con un lado visto como más difícil, más peligroso o menos merecedor de atención.

En muchos entornos, se habla de los "pacientes psiquiátricos" como caóticos, manipuladores, difíciles o menos merecedores de una atención individualizada. Mientras tanto, los pacientes con trastornos alimentarios suelen ser vistos como frágiles, funcionales o con quienes es más fácil trabajar; suposiciones que pueden parecer halagadoras a primera vista, pero que pueden minimizar la gravedad de su experiencia y crear barreras para una atención integral. Ya seas alguien que atraviesa un trastorno alimentario, un ser querido que apoya a alguien en su recuperación o un profesional que trabaja en este ámbito, es posible que hayas sentido esta división. Este tipo de división refuerza estereotipos dañinos y, francamente, simplemente no es cierto.

La verdad: los diagnósticos de salud mental no encajan perfectamente en las cajas

Muchas personas en tratamiento por trastornos alimentarios también presentan diagnósticos concurrentes: depresión, ansiedad, TEPT, trastornos de la personalidad, trastorno bipolar e incluso síntomas de psicosis. Estos no son casos aislados; forman parte de la experiencia de millones de personas.

Veamos los datos:

  • 1 de cada 5 adultos estadounidenses vive con un enfermedad mental (NAMI)
  • Hasta el 97% de las personas con trastornos alimentarios tener al menos un diagnóstico psiquiátrico adicional (PubMed)
  • 1 de cada 25 adultos estadounidenses vive con una enfermedad mental grave, como esquizofrenia, trastorno bipolar o depresión grave (NIMH)
  • El 70% de las personas con trastornos alimentarios También experimentan ansiedad o depresión (NEDA)
  • El suicidio es una de las principales causas de muerte. entre las personas con trastornos alimentarios (NIMH)
    (Fuente: NAMI)

Para quienes atraviesan un trastorno alimentario y otros problemas de salud mental, no están solos. Y para las familias, amigos y profesionales que acompañan a alguien en esa experiencia, sepan que sanar no se trata de eliminar la complejidad, sino de apoyar a la persona en su totalidad con cuidado, paciencia y dignidad.

Repensando la narrativa: desafiando la brecha en la atención de la salud mental

Cuando "paciente psiquiátrico" se convierte en sinónimo de alguien "demasiado complicado" o "demasiado", no solo reflejamos el estigma, sino que lo reforzamos. Y puede causar un gran daño:

  • Avergüenza a personas que ya están luchando por sentirse seguras o comprendidas.
  • Desalienta la honestidad y la vulnerabilidad en el trato.
  • Esto conduce a una fragmentación en la atención, donde ciertas condiciones son bienvenidas y otras son silenciosamente excluidas.
  • Crea una barrera para obtener la atención que alguien realmente necesita.

At Razones del Centro de Trastornos AlimentariosRechazamos esta división. Creemos en tratar a la persona en su totalidad, incluyendo las partes que a menudo se pasan por alto o se malinterpretan. Esto implica aceptar la complejidad, abordar las afecciones coexistentes con cuidado y competencia, y garantizar que nuestros espacios se basen en... compasión, dignidad, prácticas informadas sobre el trauma y excelencia clínica.

Si alguna vez has sentido que partes de tu historia (o la historia de alguien a quien amas o apoyas) son “demasiado”, debes saber esto: todos ustedes son bienvenidos en el proceso de curación.

¿Cómo empezamos a eliminar el estigma?

  1. Cuida nuestro lenguaje

El lenguaje moldea la percepción. En lugar de usar etiquetas como "paciente psiquiátrico", describa los comportamientos o síntomas con especificidad y empatía.

  1. Educarnos nosotros mismos

Las enfermedades mentales no son raras ni vergonzosas. Las personas que viven con afecciones mentales graves merecen una atención basada en la evidencia, no en el miedo.

  1. Interrumpir la narrativa

Cuando surja un lenguaje despectivo, deténgase y pregúntese: ¿Qué intentamos decir realmente? ¿Podemos comunicar preocupación o complejidad sin marginar?

  1. Romper los silos en el tratamiento

Tratamiento de los trastornos alimentarios is Tratamiento de salud mental. Dejemos de fingir lo contrario. La atención integrada y colaborativa beneficia a todos.

Reflexión final: Las palabras importan. También importa nuestra forma de pensar.

La mayoría de las veces, el estigma no es intencional; se manifiesta en el lenguaje que hemos asimilado, las suposiciones que hemos heredado o los sistemas en los que trabajamos. Pero cuando desestimamos, menospreciamos o devaluamos a las personas debido a su diagnóstico o cuadro clínico de salud mental, no estamos brindando atención de calidad; estamos reforzando el estigma. Sigamos pensando críticamente, hablando con intención y mostrando la compasión que todos merecen, sin importar lo que lleven.

Si lees esto como alguien en recuperación, alguien que apoya a un ser querido o alguien que trabaja en el campo, debes saber esto: tu presencia importa. No estás solo. Y juntos, podemos crear una cultura de cuidado que honre la verdad completa de lo que significa luchar y sanar.

Esta conversación no es fácil, pero es necesaria. Y estamos aprendiendo junto contigo.

Compartido con cuidado por el equipo de Reasons Eating Disorder Center, donde estamos comprometidos a fomentar espacios de curación basados ​​en la compasión, la inclusión y la dignidad.